El primer movimiento feminista en la historia fue el de las sufragistas. Se originó en Gran Bretaña y tomó lugar a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. El movimiento, dirigido principalmente por Emmeline Pankhurst, llegó a reconocerse como la primera ola del feminismo.

 

En la España del siglo XIX hacía falta una estructura política estable y equitativa. Esto se debe a que, a diferencia de los países desarrollados del momento, España carecía de un desarrollo industrial y un sistema diplomático legítimo, además de estar afectada por la soberanía de la iglesia católica y un retraso en la cultura femenina. Así, España no logró fomentar un movimiento feminista al igual que otros países europeos.

 

En esa época, la opinión popular en España, al igual que en varias partes del mundo, era que las mujeres eran biológicamente inferiores a los hombres y que en cuanto al ámbito laboral y económico, el único oficio que podrían ejercer adecuadamente  era el de madre y esposa. Por ende, el trabajo de la mujer era enriquecer los valores de la domesticidad y la familia. Ya que el feminismo quería liberarlas de el espacio doméstico, fue considerado una ofensa a la tradición e incluso una herejía dedicada a destruir los valores familiares y sociales.

 

En la primera ola del feminismo, el objetivo de las reivindicaciones sociales no estaba dirigido a complejos temas economicos o politicos, sino, a cómo el movimiento de derechos civiles en los Estados Unidos, estaba dirigido a derechos básicos que todo ciudadano debía tener. Esto incluye el derecho a la educación o trabajo, el derecho a votar y la reevaluación del concepto de la mujer.

 

Aunque tomará más tiempo para que el movimiento afecte a España, algunas mujeres empezaron a luchar por la igualdad como: Dolors Monserdà (1845-1919), Teresa Claramunt(1862-1931) y Maria de Echarri (1878-1955). Cada una aportando su granito de arena en temas de defensa a los derechos de la mujer, reevaluación de la imagen de madre como transmisora de valores y mejoras laborales para la obrera, respectivamente. Con estas aportaciones fomentaron la base para lo que más tarde se llegaría a reconocer como un movimiento feminista organizado.

 

A finales del siglo XIX y principios del siglo XX, se fomentó el proyecto de la Institución de la Libre Enseñanza que abrió las puertas a dos figuras muy importantes en la historia del feminismo español, Concepción Arenal (1820-1893) y Emilia Pardo Bazán (1851-1921). Ambas lucharon por el derecho a la educación para la mujer y la igualdad de sexo en el ámbito académico e intelectual.

 

Unos cuantos años después, comienza y se desarrolla uno de los momentos históricos más importantes del mundo: la Primera Guerra Mundial. A pesar de permanecer neutral, España se vio afectada económica y socialmente por este acontecimiento. Los problemas económicos del momento, además del principio del desarrollo industrial, provocaron la integración de la mujer en el mundo laboral y el incremento de la participación de la mujer en el ámbito socio-político.

 

En 1918, se crea la primera organización explícitamente feminista en españa: la Asociación Nacional de Mujeres Españolas. La ANME, formada en mayor parte por universitarias, mujeres de clase media y esposas de altos cargos, estaba dedicada a reivindicar el sufragio femenino. Gracias a movimientos como este, por primera vez, a partir de los años 20, se consolida la demanda por el sufragio femenino y la integración de las mujeres en la vida pública española.

 

En 1931, con el nacimiento de la Segunda República, se fomentan reformas y prácticas democráticas que, en presencia de movimientos feministas, conlleva a la concesión del derecho a votar a la mujer. Esto se da gracias a Clara Campoamor, quien se ve en una ardua lucha con Victoria Kent para resolver el debate. Kent defendió que las mujeres no estaban preparadas intelectual, política ni socialmente para esa responsabilidad, mientras que Campoamor, luchó por el sufragio femenino proclamando la importancia de la participación en la Democracia. Con todo, finalmente triunfó el sufragio femenino otorgándole el derecho al voto a la mujer.

 

Fuentes de las imágenes:

https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/3/33/Emmeline_Pankhurst_I_cropped.png